MAS DEMANDAS JUDICIALES DE LAS TELEFONICAS CONTRA LOS USUARIOS

La Asociación de Consumidores de Navarra Irache advierte sobre un importante incremento de demandas judiciales contra los usuarios por parte de varias compañías telefónicas. Desde Irache aconsejamos a los ciudadanos que no se dejen intimidar ante la reclamación de supuestas deudas por parte de estas empresas.
Algunas compañías telefónicas están optando por abrir procesos monitorios con el fin de que el consumidor se intimide ante un comunicado judicial y pague lo reclamado. Sin embargo, en muchas ocasiones, observamos que una vez que el usuario responde a la exigencia y se opone al pago, la empresa no continúa con el proceso y desiste.
Irache ha tenido conocimiento de estas prácticas por algunos de sus socios a los que la compañía telefónica ha reclamado deudas telefónicas que en muchas ocasiones no se corresponden con el uso efectuado, en ocasiones tienen que ver con el cobro improcedente de llamadas a números de tarificación adicional, con llamadas desde el extranjero o con facturas no abonadas de hace muchos años.

Ante el escrito de oposición, muchas empresas desisten del juicio

Nuestros socios han recibido una comunicación judicial en el que se les ha informado de la apertura de un proceso monitorio, mediante el cual la compañía reclama la cantidad supuestamente adeudada. Como regla general desde Irache observamos que una vez que el ciudadano ha presentado en el juzgado en los veinte días siguientes un escrito de oposición, la empresa ha decidido no seguir adelante y desistir del cobro de la deuda.
Mediante el proceso monitorio se pueden reclamar pagos de deudas de hasta 250.000 euros a través de los juzgados. Si existen principios de prueba de que la deuda existe, el Secretario Judicial requerirá al deudor para que pague, o bien se oponga presentando un escrito de oposición y alegando los motivos por los cuales no debe pagar toda o parte de la deuda. Si en veinte días el supuesto deudor no paga ni se opone, se ejecutará la deuda.
Por el contrario, si presenta un escrito de oposición, el asunto se resolverá en un juicio, ordinario o verbal, en función de la cantidad exigida. Sin embargo, es habitual que las compañías, una vez que el deudor comunica su negativa a saldar la deuda, desistan de continuar con el proceso.
En cualquier caso, lo primero que debe hacer el consumidor es informarse del origen y la veracidad de la deuda, acudir a su organización de defensa de consumidores para ser asesorado y responder dentro del plazo de veinte días con un escrito de oposición si la deuda no es real ni exigible.