Una mujer de 58 años acudía, como hacía habitualmente, a regar su huerta en un pueblo del norte de Navarra. En esta localidad se estaban realizando obras de pavimentación y cuando la asociada pasaba por esa zona tropezó por el estado del suelo y sufrió una caída. Un testigo del accidente llamó a la Agencia Navarra de Emergencias y acudió una ambulancia que trasladó a la víctima al Hospital de Navarra. En el centro se le diagnosticó fractura en el tobillo y a los días fue intervenida quirúrgicamente. La afectada estuvo cinco meses en silla de ruedas y 253 días de baja impeditiva. Por ello, desde Irache se reclamó una indemnización de 13.459 euros, que fue pagada por la aseguradora de la empresa de construcción que realizaba las obras.