La Asociación de Consumidores “Irache” ha recibido en las últimas semanas a decenas de personas que en su día invirtieron en participaciones preferentes con su banco y que ahora no pueden recuperar el dinero invertido o las entidades les están ofreciendo canjear estas preferentes por otros productos como acciones, bonos convertibles en acciones o deuda subordinada.
Irache, que ya advirtió sobre el riesgo de contratar estos productos de inversión hace un año, está estudiando cada caso de forma particular para poder defender los derechos de los ciudadanos, que en ocasiones han llegado a invertir hasta 120.000 euros en estos productos.
Productos complejos, de riesgo elevado y de carácter perpetuo
Las participaciones preferentes son productos complejos y de riesgo elevado, que tienen un carácter perpetuo y cuya rentabilidad no está garantizada. Con independencia de su carácter perpetuo, la entidad emisora suele reservarse el derecho a amortizarlas a partir de los cinco años, previa autorización del Banco de España.
Es difícil recuperar la inversión y se puede perder dinero
Las participaciones preferentes suelen cotizar en el mercado AIAF, pero como su liquidez es muy limitada, no siempre es fácil deshacer la inversión.
La rentabilidad, sujeta a que haya beneficios distribuibles
En cuanto a la rentabilidad pactada, en muchos casos el cliente dejará de cobrar estos intereses cuando no se consigan beneficios distribuibles en la entidad. Además, no es acumulable, por lo que si no se recibe la renta que corresponde a un periodo, no se puede exigir ésta posteriormente. Por otro lado, las participaciones preferentes son productos que no están cubiertos por el Fondo de Garantía.
Los bancos están ofreciendo canjearlas por acciones o deuda subordinada
Estos últimos meses muchos ciudadanos han sido informados de la intención de los bancos de canjear estas participaciones preferentes por acciones, bonos convertibles en acciones o deuda subordinada. Es entonces cuando muchos clientes están descubriendo los problemas para recuperar el dinero invertido.
Esta maniobra de algunos bancos viene determinada porque para la Autoridad Bancaria Europea, las participaciones preferentes han dejado de contar como capital de máxima calidad. Por ello, los bancos quieren cambiarlas por acciones o deuda subordinada.
Irache está estudiando los casos para valorar si ha habido falta de información
Irache está estudiando cada caso para determinar si la entidad ha incurrido en una falta de información, tanto en la suscripción de participaciones preferentes como en el canje de éstas por otros productos. Asimismo, se está valorando si se ha cumplido con la normativa en la contratación de estos productos y las vías de reclamación existentes para defender los derechos de los consumidores.
Test de conveniencia o idoneidad
Hay que tener en cuenta que cuando un consumidor quiere contratar un producto complejo -como las participaciones preferentes o la deuda subordinada por la que se están canjeando- la entidad debe realizar un test de conveniencia para asegurarse de que es un producto adecuado y de que el cliente puede comprender los riesgos que asume. Si el test dice que el producto no es adecuado para él, el interesado deberá firmar que, aún con este resultado, quiere contratar el producto.
Si es el banco el que le ofrece varios productos complejos y le recomienda alguno de ellos, tiene que realizar un test de idoneidad para valorar sus conocimientos y experiencia, su situación financiera y objetivos de inversión antes de ofrecerle el producto.
En cualquier caso, antes de tomar una decisión de inversión, desde Irache recomendamos que el consumidor valore su necesidad de dinero a corto o largo plazo y que se informe detenidamente y por escrito del producto que quiera contratar.
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